PRINCIPALES RASGOS CARACTERÍSTICOS DEL VERSO
verso
(Del lat. versus).
1. m. Palabra o conjunto de palabras
sujetas a medida y cadencia, o solo a cadencia. U. también en sentido colectivo, por
contraposición a prosa. Comedia en verso.
(DRAE)
Ritmo: rythmos en griego significaba «movimiento medido». Es la base de la
poesía y se consigue por medio de los siguientes elementos: medida y repetición
de fonemas, sílabas, palabras, sintagmas, proposiciones, oraciones, rima y versificación;
la colocación de los acentos; las pausas; la repetición de las figuras y
licencias literarias como sinalefas, aliteraciones, paralelismos, anáforas,
asíndeton, polisíndeton…
En efecto, la palabra clave para comprender lo que es el ritmo es repetición: del mismo número de sílabas, de los acentos, de la rima, de las pausas, etc.
Acento: todos los versos castellanos
llevan un acento rítmico en la penúltima sílaba (si termina en sílaba aguda, se
le añade una más; si en esdrújula, una menos), que se denomina principal.
Todos los acentos que recaen en las sílabas del mismo signo que el
principal (par o impar) son rítmicos; y extrarrítmicos aquellos que recaen en
sílabas de distinto signo.
Dos acentos rítmicos no deben ir en sílabas consecutivas.
En la versificación acentual los acentos rítmicos están colocados en
las mismas sílabas (4-8, etc.), con lo que se consigue gran musicalidad
(recuérdese que la poesía nació cantada y que la música y la poesía siempre han
estado relacionadas).
La distribución de sílabas acentuadas y no acentuadas da lugar a los
pies rítmicos: espondeo, troqueo, yambo, pirriquio, dáctilo, anapesto,
anfíbraco…
Si los acentos van en las sílabas pares, el verso es de ritmo par; si lo llevan las sílabas impares, de ritmo impar.
En los siguientes villancicos se puede comprobar (J. M.ª Alín, 1968:
93):
Serrana, ¿dónde dormistis? = e á a ó e o í i
que mala noche me distis. = e á a ó e e í i
Si amores m‘han de matar = i ó e á e a á
agora ternán lugar = a ó a e á u á
Amor loco, amor loco, = a ó ó o a ó ó o
yo por vos y vos por otro = ó o ó i ó o ó o
También se puede comprobar la perfecta construcción de pies:
Abaxa los ojos, casada, – ^ – / –
^ – / – ^ –
no mates a quien te miraba. – ^ – / – ^ – / – ^ –
Medida: cuantificación de las
sílabas, de las palabras, de los sintagmas, de las proposiciones, de las
oraciones, de los versos, de las estrofas y de los poemas.
La versificación basada en el mismo número de sílabas se llama
isosilábica; la contraria, anisosilábica.
Verso: la cuantificación de las
sílabas, basada en la sílaba fonética (no en la escrita), determina la clase de
versos: bisílabo, trisílabo, tetrasílabo, pentasílabo, hexasílabo, heptasílabo,
octosílabo, eneasílabo, decasílabo, endecasílabo, dodecasílabo, tridecasílabo,
tetradecasílabo o alejandrino, pentadecasílabo, hexadecasílabo o de dieciséis
sílabas, heptadecasílabo o de diecisiete sílabas, etc.
En español no hay versos monosílabos, porque, al ser estos siempre agudos,
se cuenta una sílaba más.
Si los versos tienen la misma medida, son de versificación métrica; si
no tienen la misma medida, de versificación amétrica (frecuente en la poesía
del Medievo).
Los versos de dos a ocho sílabas se llaman de arte menor (que se indica
con minúsculas); los de nueve en adelante, de arte mayor (que se indica con
mayúsculas).
A veces los versos están divididos por pausas internas uniformes o
cesuras; en este caso se denominan versos compuestos, y cada una de las dos
partes, hemistiquios.
Si un verso tiene menos sílabas que el resto, es de pie quebrado.
Si los versos tienen la misma medida, son llamados parisílabos; si
presentan distinta medida, imparisílabos.
Los versos que no guardan rima en una estrofa en la que los otros sí
riman constituyen los versos sueltos; los de una estrofa en la que no existe
rima pero si medida se llaman blancos; y los que no están sujetos a medida,
libres.
El verso más popular en castellano, por su uso en los romances y en el
teatro, es el octosílabo, pero el endecasílabo, utilizado en los sonetos, está
considerado como el más perfecto y culto en la versificación clásica.
Las
distinas épocas y los distintos movimientos y grupos literarios generan modas o
hábitos sobre todos estos aspectos, como en el resto de las actividades
humanas.
Rima: repetición de los mismos
sonidos a partir de la última sílaba acentuada: si sólo se repiten las vocales,
la rima es asonante; si se repiten vocales y consonantes, la rima es
consonante; y si hay ausencia de rima, rima cero.
En los diptongos y triptongos sólo cuenta la vocal acentuada; en las
palabras esdrújulas, la acentuada y la final. Se admiten también ciertas
licencias, por ejemplo: en finales de palabras llanas y esdrújulas a veces se
igualan la u y la i con la o y con la e, respectivamente. Recordemos que la
rima se basa en sonidos, no en letras, por lo tanto riman, por ejemplo,
sumergen y tejen o cava y amaba.
Pausa: detención de la emisión de
sonidos. En poesía se tiene que hacer una leve pausa al final de cada verso; es
lo que se denomina pausa versal, que generalmente coincide con la pausa
sintáctica. Si no hay coincidencia entre ambas, se produce el encabalgamiento,
en el que la pausa versal no interrumpe la continuidad sintáctica y semántica,
que se prolonga en el verso siguiente.
Estrofa: conjunto de versos con una
estructura rimada que se repite a lo largo de un poema. Cada poeta es libre de
crear sus propias estrofas, pero las más utilizadas en la poesía española son
las siguientes:
VERSIFICACIÓN
Verso: expresión
realizada en un periodo rítmico fijo, o con una cierta cadencia y/o medida.
Versos
de arte menor: los que tienen de dos a ocho
sílabas.
Dos sílabas: bisílabo
Tres sílabas: trisílabo
Cuatro sílabas: tetrasílabo
Cinco sílabas: pentasílabo
Seis sílabas: hexasílabo
Siete sílabas: heptasílabo
Ocho sílabas: octosílabo
Versos
de arte mayor: los que tienes más de ocho sílabas.
Nueve sílabas: eneasílabo
Diez sílabas: decasílabo
Once sílabas: endecasílabo
Doce sílabas: dodecasílabo
(6+6)
Trece sílabas: tredecasílabo
Catorce sílabas: alejandrino
(7+7)
Estrofa: agrupación
estructurada de varios versos.
Existen distintos tipos de
estrofa, según su número de versos y su esquema métrico.
Esquema
métrico: una expresión abreviada del número de versos y la distribución de los
mismos, en cuanto a su rima y su medida, a lo largo de una estrofa.
Hay ciertos esquemas
métricos o estructuras estróficas que se repiten con una cierta frecuencia y
acaban consolidándose como estrofas con nombre propio.
Para realizar el esquema
métrico de un poema hemos de medir cada uno de los versos y señalar las rimas
correspondientes siguiendo el ejemplo que exponemos a continuación:
Buscando mis
amores, 7a
iré por esos
montes y riberas, 11B
ni cogeré las
flores, 7a
ni temeré las
fieras, 7b
y pasaré los
puertos y fronteras. 11B
(San Juan de la Cruz)
O lo que es lo mismo: 7a 11B
7a 7b 11B; o abreviadamente: aBabB.
En el esquema métrico, las
cifras señalan el número de sílabas versales, para el que habrá que tener en
cuenta diptongos, sinalefas, hiatos del verso (a veces señalados con diéresis
sobre alguna vocal, y otras realizados por exigencia de la medida
preestablecida del verso o la estrofa: p. ej., si en una estrofa todos los
versos son isométricos o responden a un esquema previo, habrá que sospechar que
el poeta se ha tomado alguna licencia no advertida explícitamente si algún
verso, de forma excepcional, no responde a esa medida o estructura), etc.
Métrica es la
disciplina que permite conocer y determinar la medida de un verso y sus
posibles combinaciones.
Los distintos fenómenos
métricos que hacen que un verso tenga una medida distinta de la simple suma de
las sílabas de las palabras que lo componen son, como ya hemos citado, los
siguientes:
- Sinalefa: la unión de la vocal con que acaba
una palabra con la vocal con que comienza la siguiente.
- Diéresis: la ruptura artificial de un diptongo,
que el poeta señala con los dos puntos llamados diéresis sobre la vocal
débil del citado diptongo.
- El último acento versal: el acento de la última
palabra del verso hace que sumemos o restemos sílabas, porque se supone
que todos los versos de la poesía española han de ser graves o llanos (el
último acento versal ha de caer en la penúltima sílaba), de modo que si
son agudos (el acento cae en la última sílaba) se debe contar una sílaba
más, y si son esdrújulos (el acento cae en la antepenúltima sílaba) se
debe contar una sílaba menos.
Rima. Ya hemos
dicho que, junto a la medida de los versos, la rima es importante para identificar
las distintas estrofas de un poema.
La rima es la repetición
total o parcial de sonidos en dos o más versos a partir de la última vocal
acentuada de cada uno de ellos.
La rima puede ser asonante o
consonante. En la rima asonante sólo se repiten las vocales
(y ocasionalmente, quizás,
alguna consonante) a partir de la última vocal acentuada, y en la rima
consonante se repiten todos los sonidos, vocales y consonantes.
La rima asonante se asocia
con la poesía popular (como los versos irregulares) y la rima consonante con la
poesía culta (al igual que los versos regulares o isómetros), lo cual no impide
que un poeta culto realice versos irregulares o los haga con rima asonante o,
aunque más raramente, que un poema popular o tradicional pueda crearse con
versos regulares y rima consonante.
Los versos que no riman en
una estrofa se llaman versos sueltos; los que componen una estrofa en la que
los versos están sujetos a medida pero no rima ninguno, versos blancos; los
versos que forman una estrofa en la que ni riman ni tienen una medida
determinada, tan sólo sometidos a una cierta cadencia rítmica, versículos o
versos libres (aunque personalmente me quedo con versículos y utilizaría la expresión versos libres para definir a aquellos
que riman sin un orden preestablecido y son asimétricos, a la libre elección
del poeta).
Las
principales estrofas de la poesía española son las siguientes:
De
dos versos:
·
Pareado: con
estructura AA, aa, e incluso aA, o bien Aa.
Ej.:
Y, antes que poeta, mi deseo
primero
hubiera
sido ser un buen banderillero.
(Antonio Machado)
·
Aleluya: pareado de
versos octosílabos (o de arte menor), popular o vulgar. Esquema aa.
Y sin haberlo pensado
me ha salido un pareado.
(Popular)
De
tres versos:
·
Terceto: tres versos
de arte mayor, dos de los cuales riman entre sí.
Esquemas
posibles: A-A, AA-, -AA (el más
habitual es el primero).
No
he de callar, por más que con el dedo,
ya tocando la boca, ya la frente,
silencio avises o amenaces miedo.
(Francisco de Quevedo)
·
Tercetos
encadenados: serie de tercetos en los que el verso suelto del primer terceto rima
con el primer verso del siguiente terceto y así sucesivamente. Esquema: ABA BCB CDC DED ...
·
Tercerilla (la
RAE no recoge ni ‘tercerillo’ ni ‘tercetillo’): tres versos de arte menor,
dos de los cuales riman, generalmente en consonante, quedando uno suelto. Suele
aparecer encadenada, como el terceto. (Se da también la variante monorrima.)
No hablo por hablar. Escribo
hablando sencillamente:
como en un cantar de amigo.
(Blas de Otero)
Maldita
sea mi suerte.
Mi
novia me ha sorprendido
en la cama con la muerte.
(Luis Alberto de Cuenca)
·
Soleá o soledad: tres versos
de arte menor y rima asonante a-a. Tonada
andaluza de carácter melancólico, en compás de tres por ocho. Uno de los palos
o cantes grandes del flamenco.
Tengo un querer y una pena.
La pena quiere que viva;
el querer quiere que muera.
(Manuel Machado)
De
cuatro versos:
·
Cuaderna
vía: versos alejandrinos
que riman todos en consonante: AAAA.
Estrofa característica del Mester de Clerecía.
Yo, como soy humano y, por tal, pecador,
sentí por las mujeres, a veces, gran
amor.
Que probemos las cosas no siempre es lo
peor;
el bien y el mal sabed, y escoged lo
mejor.
(Arcipreste de Hita)
·
Cuarteto: estrofa de
arte mayor con esquema ABBA.
¿Qué tengo yo que mi amistad
procuras?
¿Qué interés se te sigue,
Jesús mío,
que a mi puerta, cubierto de
rocío,
pasas las noches del invierno
oscuras?
(Lope de Vega)
·
Serventesio: también de
arte mayor, pero con esquema ABAB.
Yo soy aquel que ayer no más
decía
el verso azul y la canción
profana,
en cuya noche un ruiseñor
había
que era alondra de luz por la
mañana.
(Rubén Darío)
·
Redondilla: como el
cuarteto, pero de arte menor, con esquema abba.
Es el mejor de los buenos
quien sabe que en esta vida
todo es cuestión de medida:
un poco más, algo menos...
(Antonio
Machado)
·
Cuarteta: como el
serventesio, pero de arte menor, con esquema abab.
Ayer soñé que veía
a Dios y que a Dios hablaba;
y soñé que Dios me oía...
Despué soñé que soñaba.
(Antonio Machado)
·
Copla: estrofa de
arte menor y con esquema -a-a. La
rima suele ser asonante.
Cuando me pongo a cantar
me salen, en vez de coplas,
me salen, en vez de coplas,
las lágrimas de los ojos,
los suspiros de la boca.
(Antonio Machado)
·
Copla de arte
mayor: con la misma estructura que la copla, pero de arte mayor y rima
consonante.
Arrojome las naranjitas
con las ramas de blanco azahar;
arrojómelas y arrojéselas
y volviómelas a arrojar.
(Anónimo)
·
Copla de pie
quebrado: con la misma estructura de las anteriores pero con el último verso de
pie quebrado (de menor medida).
Los suspiros son aire y van al aire.
Las lágrimas son agua y van al mar.
Dime, mujer, cuando el amor se olvida,
¿sabes tú adónde va?
(Gustavo Adolfo Bécquer)
·
Seguidilla: composición con
el esquema métrico 7- 5a 7- 5a. Puede
llevar bordón (tres versos más, en
este caso): 7- 5a 7- 5a 5b 7- 5b. La
rima, en ambos casos, suele ser asonante.
Pues andáis en las palmas,
ángeles santos,
que se duerme mi niño,
¡tened los ramos!
(Lope de Vega)
A la Virgen del
Carmen
quiero y adoro,
porque
saca a las almas
del
purgatorio.
Saca la mía,
que penando la tengo
de noche y día.
(Anónimo)
De cinco versos:
·
Quinteto: cinco versos
isosilábicos (generalmente endecasílabos) de arte mayor con rima consonante, a
menudo alternada. La rima más frecuente es: ABAAB.
Ese vago clamor que rasga el viento
es la voz funeral de una campana;
vano remedo del postrer lamento
de un cadáver sombrío y macilento
que en sucio polvo dormirá mañana.
(José Zorrilla)
·
Quintilla: la misma
estructura que el quinteto, pero de arte menor.
Me levanto de
la silla
solo para demostrar
que el hacer
una quintilla
es la cosa mas
sencilla
que se puede
imaginar.
(José Zorrilla)
·
Lira: versos endecasílabos y heptasílabos con
rima consonante aBabB.
Si de mi baja lira
tanto pudiese el son que en un momento
aplacase la ira
del animoso viento
y la furia del mar y el movimiento.
(Garcilaso de la Vega)
De seis versos:
·
Sexteto, sextina o
sexta rima: versos de arte mayor y
rima consonante variable; el esquema más frecuente es AABCCB o ABCABC.
¡Niños!, al soplo de mi tibio aliento,
dormid en paz, que os cubren con sus alas
los blancos y amorosos serafines,
y adornándoos a un tiempo con sus galas
hacen que en ondas os regale el viento
blando aroma de lirios y jazmines.
(Rosalía de Castro)
·
Sextilla: con la misma estructura que la sextina pero con
versos de arte menor.
Al par que altiva, imponente;
al par que dulce, severa;
larga y blonda cabellera
la adornaba con decoro,
apiñando conchas de oro
sobre su busto de cera.
(Rosalía de Castro)
·
Sextina
de pie quebrado o copla manriqueña: con rima consonante y
estructura 8a8b4c8a8b4c.
Manrique une en sus coplas dos sextinas de pie quebrado.
Recuerde el alma dormida,
avive el seso y despierte
contemplando
cómo se pasa la vida,
cómo se viene la muerte
tan callando;
cuán presto se va el placer,
cómo, después de acordado,
da dolor;
cómo, a nuestro parecer,
cualquiera tiempo pasado
fue mejor.
(Jorge Manrique)
·
Sexteto-Lira: estrofa con versos endecasílabos y
heptasílabos con rima abCabC.
¡Oh llama de amor viva,
que tiernamente hieres
de mi alma en el más profundo centro!;
pues ya no eres esquiva,
acaba ya, si quieres;
rompe la tela deste dulce encuentro.
(San Juan de la Cruz)
De ocho versos:
·
Copla de arte mayor: versos de arte mayor y rima consonante;
su estructura más frecuente es ABBAACCA.
Al muy prepotente don Juan el segundo
aquel con quien Júpiter tuvo tal celo
que tanta de parte le hizo del mundo
quanta a sí mismo se hizo del çielo,
al gran rey de España, al Çésar novelo;
al que con Fortuna es bien fortunado,
aquél en quien caben virtud e reinado;
a él, la rodilla hincada por suelo.
(Juan de Mena)
·
Octava real:
versos endecasílabos y rima
consonante ABABABCC.
Cerca del Tajo, en soledad amena,
de verdes sauces hay una espesura
toda de hiedra revestida y llena,
que por el tronco va hasta el altura,
y así la teje arriba y encadena
que el sol no halla paso a la verdura;
el agua baña el prado con sonido,
alegrando la hierba y el oído.
(Garcilaso de la Vega)
·
Octava italiana: versos endecasílabos y rima consonante
libre, siendo la estructura más frecuente: -AAB-CCB.
Y él, envuelto en sus secas coyunturas,
aún más sus nudos que se aprietan siente,
baña un mar de sudor su ardida frente
y crece en su impotencia su furor.
Pugna con ansia a desasirse en vano,
y cuanto más airado forcejea,
tanto más se le junta y le desea
el rudo espectro que le inspira horror.
(José de Espronceda)
·
Octavilla italiana: con la misma estructura que la anterior,
pero con versos de arte menor.
Con diez cañones por banda,
viento en popa, a toda vela,
no corta el mar, sino vuela
un velero bergantín.
Bajel pirata que llaman,
por su bravura, el Temido,
en todo el mar conocido
del uno al otro confín.
(José de Espronceda)
De diez versos:
·
Décima, décima real o espinela: versos octosílabos y rima consonante abbaaccddc.
Admirose un portugués
de ver que en su tierna infancia
todos los niños en Francia
supiesen hablar francés.
“Arte diabólica es”,
dijo, torciendo el mostacho,
“que para hablar en gabacho
un fidalgo en Portugal
llega a viejo, y lo habla mal;
y aquí lo parla un muchacho”.
(Nicolás Fernández de Moratín)
De catorce versos:
·
Soneto: estrofa de versos de arte mayor,
generalmente endecasílabos, formada por dos cuartetos y dos tercetos con las
rimas vinculadas entre sí: el primer y cuarto verso del primer cuarteto rimarán
con el primer y cuarto verso del segundo cuarteto, y el segundo y tercer verso
del primer cuarteto riman asimismo con el segundo y tercer verso del segundo
cuarteto; los tercetos van encadenados o rimando de algún modo entre sí. La
estructura más frecuente es ABBA ABBA CDC DCD. Puede llevar estrambote: unos versos añadidos al
final (por lo general, un terceto).
Un soneto me manda hacer
Violante,
que en mi vida me he visto en
tanto aprieto;
catorce versos dicen que es
soneto;
burla burlando van los tres
delante.
Yo pensé que no hallara
consonante,
y estoy a la mitad de otro
cuarteto;
mas si me veo en el primer
terceto,
no hay cosa en los cuartetos que
me espante.
Por el primer terceto voy
entrrando,
y parece que entré con pie
derecho,
pues fin con este verso le voy
dando.
Ya estoy en el segundo, y aun
sospecho
que voy los trece versos
acabando;
contad si son catorce, y está
hecho.
(Lope de Vega)
·
Sonetillo:
soneto de arte menor.
Frutales
cargados.
Dorados
trigales...
cargados.
Dorados
trigales...
Cristales
ahumados.
Quemados
jarales...
ahumados.
Quemados
jarales...
Umbría
sequía,
solano...
sequía,
solano...
Paleta
completa:
verano.
completa:
verano.
(Manuel Machado)
Estrofas con un número indeterminado de
versos:
·
Silva: combinación de versos heptasílabos y endecasílabos
con rima consonante al arbitrio del poeta, pudiendo quedar algunos versos
libres. Si la combinación de la primera estrofa se vuelve a repetir en las
siguientes, la composición recibe el nombre de estancia.
·
Romance: serie indeterminada de versos octosílabos con rima
asonante en los pares. El romance
endecha es de versos heptasílabos y asunto triste; el romancillo, de versos hexasílabos; el romance real o heroico, de endecasílabos.
“Abenámar, Abenámar,
moro de la morería,
el día que tú naciste
grandes señales había.
Estaba la mar en calma,
la luna estaba crecida;
moro que en tal signo nace,
no debe decir mentira.”
(Anónimo)
- Zéjel: es un poema de origen árabe formado por un estribillo
(cantado por un coro) y una o varias glosas, también llamadas mudanza
(cantadas por un solista). De esta estrofa deriva el villancico o canción de los villanos (no siempre asociado a la
temática navideña), y otras estrofas populares.
En la fuente del rosel
lavan la niña y el doncel.
En la fuente de agua clara
Con sus manos lavan la cara,
Él a ella y ella a él.
Lavan la niña y el doncel.
En la fuente del rosel
Lavan la niña y el doncel.
(Anónimo)
1 comentario:
Romance
Anoche soñé que te tenía
Pero desperté y no te vi
Sentí que te sentía
Pero tú no estabas con migo.
Yo no te quería
Pero nunca imaginé
Todo lo que perdería.
Al no sentir tus manos de noche
Y al no sentirlas de día.
Natalia Ávila 3ºA
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